Y al final, en Berlín!

Pues ya he llegado más o menos al momento actual.
Ya estoy en Berlín (nooo, no puede ser, de veras??).

Todo bien, la gente, el trabajo, la gente del trabajo. Hay un ambiente inmejorable.
La verdad es que hacer posts a toro pasado no es divertido, así que voy a poner unas fotos de mis andanzas en este tiempo que llevo aquí y así por lo menos se pasa mejor el rato.

Estos son mis compañeros de beca. De izquierda a derecha: Isa (COMEX), Maite (Industrias Culturales), Edu (MACRO) y Yosu (Tecnológico).

Esta foto está hecha en la cocina de mi piso, porque al principio los 4 se quedaron en mi casa, aunque no todos a la vez, pero casi. Ahora ya se me han independizado. Les ves crecer... y luego se marchan... ains, qué dolor más grande en el pecho.

Ahora las estanterías también tienen menos comida. Dejao que es uno.

Y también tengo una jarra de Brita, María, como tú en Irlanda (ya sé que las hay en España también, pero soy muy emocionable).

En el trabajo todo bien, trabajo en el edificio de la embajada (olé), aunque no para la embajada, y de hecho no soy trabajador en sí, si no becario, aunque eso no quiere decir que no trabaje, que trabajo mucho y muy bien (si queréis mi CV os lo mando).

Y aquí voy a poner una foto de la embajada, que viste mucho.

Es un edificio que le regaló Hitler a Franco, supongo que del amigo invisible. No es realmente así, si no que se lo intercambiaron. A Hitler le gustaba el solar de la antigua embajada y le dijo a Franco: -"Mira te pongo un cuádruplex en una zona más centrica y tu me dejas tu piso de proletariado en la zona que a mí me interesa". Y Franco dijo yes, of course.

Así que aquí estoy yo, en la primera planta del cuádruplex de Franco, aunque ahora ya ha cambiado de dueños, y hay un busto gigante del actual dueño en la entrada. Ya me haré una foto con el busto para que conozcáis al dueño, muy majo él.

Y tengo que poner también fotos de la zona en la que vivo, que está muy bien. Es la zona en la que todo joven que se precie quiere vivir. Porque hay zonas para salir, porque hay más gente joven viviendo, todas esas cosas. Así que contento. ¡Mama, estáte tranquila!
Pero todo esto será en siguientes posts (a ver si me centro que me salen posts muy anárquicos).

Repartidos por el mundo

Pues esta foto es de todos los compañeros que nos vamos a distintos lugares del mundo. ¡Qué felices se nos ve! Será porque lo estamos.

Ha sido un mes fabuloso, yo me lo he pasado como nunca, y eso que las clases de alemán no me dejaban ni tiempo... Pero aún así, un tiempo mu bien aprovechado.

Las fotos del curso y de las salidas nocturnas (extracto de los casi 600 Mb), las podéis ver en los blog de la página http://diplomaticos2007.ionosfera.com, que hay muchas y muy buenas.

¡Buena suerte a todos!

AyT

Pues AyT es la empresa en la que yo trabajaba hasta que decidí embarcarme en esta aventura.
Siempre que me preguntan a qué se dedica yo digo que es una empresa financiera, aunque nunca estoy seguro de si realmente lo es. La gente que sabe un poco más dice que es una empresa relacionada con bolsa, pero yo no sé hacer tales distinciones. Todavía no, todo llegará.
Pues bien, la empresa hace más o menos bien su trabajo, yo creo que bien pero realmente no lo sé. Y no me importa. Porque lo que siempre me ha importado de esta empresa es la gente que trabaja en ella (atención preparar los pañuelos que empieza la fiesta...).
Mi contrato decía que yo era Informático, así en genérico. Bueno, pues informático. Y la verdad es que es la mejor definición del puesto que hay, porque en la "sección de informática" se hace todo lo que a un lego en informática le pueda sonar a informática. Desde configurar la wifi de la empresa hasta tirar cables por el falso techo, pasando por la programación (en VB pa más inri). Esto que en principio puede sonar malamente, ya que te va a tocar lidiar hasta con la señora de la limpieza, puede resultar hasta gratificante, porque te sirve para relacionarte con todo el mundo que está en la empresa, y así conocer a la gente con la que estás trabajando. Así, de esta forma, descubrí yo que la mayoría de la gente de mi antigua empresa es excepcional.
Y realmente lo son, no es una forma de hacerles la rosca.
De todas formas yo creo que no vería la empresa de la misma manera si no fuera por el jefe que he tenido. Facilitando siempre las cosas. Qué pocos quedan... Y por mis compis de sección, que a todo le ponían el punto divertido (pelotari sessions). Así, sí que se puede trabajar.
Aunque el resto de la empresa no se quedaban atrás: las niñas, los niños, sí que se echa de menos.
Esta es mi manera de agradeceros el año y medio tan bueno que he pasado en AyT.
Así que chicos, gracias.
(Y ya os pasaré mi recién abierta cuenta de PayPal).

Juanqui forever!